domingo, 27 de noviembre de 2011

CÉSAR GERMÁN YÁÑEZ MUÑOZ, COMPAÑERO AGUSTÍN, PEDRO, MANUEL

Nació en la ciudad de Monterrey, N. L. el 23 de octubre de 1942. Era hijo del doctor Margil Yáñez Martínez y de la señora Beatriz Muñoz. Cursó el bachillerato en la Preparatoria No. 1 de la Universidad de Nuevo León y estudió leyes en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la misma.
En 1960 ingresó a la Asociación de Jóvenes Esperanza de la Fraternidad (AJEF) y comenzó a participar activamente en el movimiento estudiantil. En 1963 fue electo presidente de la Sociedad de Alumnos de la Facultad de Derecho y el mismo año intervino en la conformación del comité neoleonés del Movimiento de Liberación Nacional, del que se separó en 1965.
Yáñez y sus amigos más cercanos se dedicaron a asesorar movimientos campesinos y obreros y editaron el periódico Pueblo y Revolución. Debido a sus actividades, César pisó la cárcel por lo menos tres veces, pero salió de inmediato debido a que la presión popular impedía que hubiera presos políticos en el estado. Por aquel entonces, el grupo de César, integrado por simpatizantes fervorosos de la revolución cubana, promovió la creación de la Unión Revolucionaria Socialista (URS), la cual tomó las riendas del Instituto Mexicano-Cubano de Relaciones Culturales sección Monterrey, N.L. (IMCRC).
A través de Carlos Vives, Yáñez contactó a Mario Menéndez en la Ciudad de México y éste invitó a la URS a formar parte del Ejército Insurgente Mexicano (EIM) que se gestaba en la selva lacandona. De este modo, el joven César abandonó definitivamente a su esposa y a sus dos hijos y se dedicó de tiempo completo a la lucha revolucionaria.
Cuando el EIM se disolvió, algunos de sus miembros tomaron la decisión de conformar las Fuerzas de Liberación Nacional (FLN), en cuya asamblea fundacional Yáñez fue elegido como primer responsable, un 6 de agosto de 1969. En 1972 impulsó la formación del Núcleo Guerrillero Emiliano Zapata (NGEZ), del que fue comandante en jefe y, en 1974, cuando dio inicio la primera operación contrainsurgente en las cañadas, conocida como Operación Diamante, "Manuel" dirigió el repliegue táctico del grupo en la selva lacandona, pero fue descubierto y asesinado por el ejército en Cintalapa, mpo. de Ocosingo, el 16 de abril de 1974. Su cuerpo nunca fue encontrado y su familia denunció su desaparición por razones políticas. La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) acreditó el delito de desaparición forzada contra su persona en el año 2001. El Ejército Zapatista de Liberación Nacional le ha extendido un reconocimiento especial en algunos comunicados.

viernes, 25 de noviembre de 2011

EZLN: 28 años de congruencia y lucha ética

Veintiocho años han pasado desde que en las entrañas indígenas de Chiapas se formó la organización política que a partir de 1994 sería conocida como Ejército Zapatista de Liberación Nacional. La rebelión armada del EZLN se fundamentó en la aplicación del artículo 39 constitucional, que a la letra dice: La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo. Todo el poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio de éste. El pueblo tiene, en todo tiempo, el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno. La Primera declaración de la selva Lacandona (1993) asentaba: “Nuestra lucha se apega al derecho constitucional y es abanderada por la justicia y la igualdad… Tenemos al pueblo mexicano de nuestra parte, tenemos patria y la bandera tricolor es amada y respetada por los combatientes insurgentes, utilizamos los colores rojo y negro en nuestro uniforme, símbolos del pueblo trabajador en sus luchas de huelga, nuestra bandera lleva las letras EZLN, Ejército Zapatista de Liberación Nacional, y con ella iremos a los combates siempre”. Fue premonitorio, dados los tiempos que vivimos, que en este documento el EZLN advirtiera: “Rechazamos de antemano cualquier intento de desvirtuar la justa causa de nuestra lucha acusándola de narcotráfico, narcoguerrilla, bandidaje u otro calificativo que puedan usar nuestros enemigos”.

Desde su irrupción en los ámbitos políticos nacional e internacional, el EZLN significó una refutación innegable a las ideas que pretendían imponerse después de la desaparición de la Unión Soviética y el campo socialista en torno al pensamiento único, el fin de la historia y el triunfo definitivo del capitalismo a escala planetaria. También constituyó una de las primeras manifestaciones de lucha revolucionaria contrarias al neoliberalismo, cuyo profeta y ejecutor en México, Carlos Salinas de Gortari, impuso el Tratado de Libre Comercio (TLC) y la contrarreforma del artículo 27 constitucional, que ponía en venta las tierras ejidales y comunales y con ello rompió el pacto social al que dio cauce el movimiento armado de 1910 a 1917.

El Ejército Zapatista, como organización clandestina político-militar, hereda tardíamente las siglas de liberación nacional que caracterizaron a numerosos movimientos insurgentes que enraizados en las realidades de nuestra América intentaron instaurar una nación de nuevo tipo, hegemonizada por los sectores explotados, oprimidos, discriminados y libre de las ataduras de la articulación imperialista representada por Estados Unidos. No obstante, su composición mayoritariamente indígena otorgó al EZLN una identidad distinta a otras organizaciones guerrilleras mayoritariamente mestizas, como el FSLN, el FMLN o la propia URNG, en nuestro entorno geográfico centroamericano.

El EZLN estableció una continuidad histórica de las resistencias de los pueblos que conforman México, y se definía así en 1993: Somos producto de 500 años de luchas: primero contra la esclavitud, en la guerra de Independencia contra España encabezada por los insurgentes, después por evitar ser absorbidos por el expansionismo norteamericano, luego por promulgar nuestra Constitución y expulsar al imperio francés de nuestro suelo, después la dictadura porfirista nos negó la aplicación justa de leyes de Reforma y el pueblo se rebeló formando sus propios líderes, surgieron Villa y Zapata, hombres pobres como nosotros a los que se nos ha negado la preparación más elemental para así poder utilizarnos como carne de cañón y saquear las riquezas de nuestra patria sin importarles que estemos muriendo de hambre y enfermedades curables, sin importarles que no tengamos nada, absolutamente nada, ni un techo digno, ni tierra, ni trabajo, ni salud, ni alimentación, ni educación, sin tener derecho a elegir libre y democráticamente a nuestras autoridades, sin independencia de los extranjeros, sin paz ni justicia para nosotros y nuestros hijos.

Si tomamos como criterio actual para definir a la izquierda, como la fuerza política que construye poder popular contra el capitalismo, sin monopolizar la representación ni restar protagonismo a los distintos sectores socio-étnicos que intervienen en ese proceso, el EZLN ha sido una organización extremadamente congruente con uno de sus más caros principios: Para todos todo, para nosotros nada, que hace realidad cuando retira a todos sus cuadros político militares de los distintos gobiernos autónomos bajo su hegemonía.

Mandar obedeciendo es una forma diametralmente opuesta al vanguardismo, al burocratismo, a la conformación de castas que hacen del poder gubernamental y la representación popular su modus vivendi y que han devenido maquinarias partidistas electorales que a toda costa pretenden el cargo público para su propio beneficio y enquistarse en una clase política divorciada del pueblo. Institucionales y sistémicas, estas izquierdas no llegan más lejos que la alternancia, y una vez en el gobierno ponen en práctica programas extractivistas, desarrollistas, clientelares, asistenciales, para paliar la cara dura del neoliberalismo pero procurando no alterar en lo más mínimo el dominio estratégico del capital y los poderes facticos que lo sostienen.

A lo largo de esto 28 años, el EZLN ha dado muestra de una extraordinaria capacidad de adaptación e innovación, sin tirar por la borda principio alguno, aportando en temas cruciales como el que dio curso a la Ley Revolucionaria de las Mujeres y su incorporación plena a todos los ámbitos de los procesos autonómicos, educando a las nuevas generaciones en preceptos pedagógicos liberadores, asumiendo la dignidad y la solidaridad como brújula rectora de la convivencia social, el gobierno como servicio, amasando, a su manera, las ancestrales utopías revolucionarias. Felicidades, compañer@s.

lunes, 14 de noviembre de 2011

Los peligros del mundo y las ciencias prohibidas, Pablo González Casanova

No hay duda que vivimos en un mundo injusto y peligroso. La opción racional que orienta a las ciencias sociales hegemónicas se está convirtiendo, paradójicamente, en opción irracional. El control de riesgos nos está llevando a riesgos descontrolados. Modelos y formalizaciones muestran aquí y allá signos entrópicos amenazadores. Las falsas leyes del mercado libre que por sí solo se requilibra, y cuyas políticas siempre han derivado en graves crisis, nuevamente se ven disconfirmadas, y quienes anunciaron que pronto habría de superase la crisis que nos abruma, a poco se vieron obligados a reconocer que la actual crisis es más grave de lo que pensaron y de mayor duración.

La disminución de riesgos y la optimización de utilidades de las megaempresas y complejos hegemónicos parecen asociarse a la maximización de riesgos y de pérdidas en el conjunto de que forman parte. Que esa asociación, correlación o coincidencia muestran una relación de causa a efecto es algo que no puede descartarse. Y, sin embargo, la relación de causa a efecto entre los intereses y valores de las grandes corporaciones y los graves peligros y problemas del mundo es generalmente descalificada por el pensar científico, y relegada al mundo de la negación o rechazo, que Freud descubrió entre las características del inconsciente, y que también parece darse en el inconsciente de las colectividades científicas y de los complejos militares-empresariales y políticos, todos ciegos ante las causas de los peligros del mundo y sordos ante las tragedias humanas a que se refieren como si fuesen fenómenos naturales en cuya solución están haciendo todo lo que se puede y en que dan por entendido que no se puede hacer más.

La negación o descalificación, consciente o inconsciente, de la relación de causa a efecto aparece incluso en los análisis, modelaciones y formalizaciones de los sistemas complejos. Su concepción más generalizada de la complejidad no registra la paradoja entre la opción racional de las corporaciones que buscan disminuir riesgos y optimizar utilidades, y la irracionalidad y los riesgos que en forma monstruosa para las matemáticas de entonces aparecieron en las iteraciones algebraicas de Poicaré, y que con las modelaciones de ahora derivan en esa Edad de los monstruos a que se refirió Gramci, y que corresponde a la maximización de pérdidas y riesgos para la inmensa mayoría de la humanidad y para el ecosistema.

Al mismo tiempo, el concepto prevaleciente de sistemas complejos –como ha observado Casti– incluye múltiples relaciones interactivas de manera muy superficial. Con plena razón, Casti define y formaliza el concepto de sistema complejo como dos o más sistemas complejos interactivos entre sí y en su propio interior. Un solo sistema complejo empobrece y hasta anula la dinámica de sistemas no lineales e interactivos. Su pensamiento sobre las características generales de la complejidad alcanza una profundidad de que pocos se percatan. Incluso los especialistas que incluyen en sus investigaciones dos o más sistemas complejos que interactúan, cuando se refieren al concepto de complejidad sólo destacan la complejidad de un sistema complejo. Esta ruptura epistemológica parece obedecer a un preconcepto con fuertes tradiciones en el pensamiento científico, en el filosófico y en el religioso. Empecemos por estos últimos. Muchos de los que abandonan la lógica religiosa del monoteísmo, no abandonan la lógica laica de lo uno. Definen y formalizan la complejidad de un sistema. Si lo uno predomina en la cibernética también se da en los modelos econométricos neoclásicos y neoliberales. En el discurso científico acostumbrado o normal se habla del universo como un universo en el que pueden darse planetas, átomos y múltiples agentes que interactúan en modelos de competencia y colaboración. Incluso se trabaja con sistemas interactivos sinérgicos, cooperativos, aliados o tributarios (Axelrod) y opuestos, enemigos, contrarios y rebeldes: y todas esas posibilidades cognitivas de sistemas interactivos se dan en función de un sistema, el sistema del observador.

La ruptura epistemológica subsiste incluso cuando se avanza en la concepción de los sistemas biológicos autorregulados, autoadaptables y creadores, o en los sistemas en fase de transición al caos o en los que emergen de una situación caótica y, entre bifurcaciones y atractores, van configurando formaciones parecidas a escalas distintas hasta integrar el nuevo sistema con otra complejidad y otra dinámica. Todas estas investigaciones sobre la dinámica de varios sistemas no acaban con la lógica de lo Uno. Casi sin pensar sus autores, automáticamente, definen la complejidad como un sistema complejo o en relación a un sistema complejo. No hay sistema alternativo. Otro sistema no es posible.

Y aun ahí no queda todo. La ruptura entre las investigaciones específicas y las concepciones generales es todavía más impresionante cuando sus autores trabajan en investigaciones sobre sistemas complejos interactivos como los sistemas auto-inmunológicos. En ese tipo de sistemas claramente aparecen los anticuerpos negativos y positivos que luchan entre sí, en que los anticuerpos negativos no sólo ganan las batallas destruyendo directamente a los positivos, sino confundiendo al sistema encargado de la defensa del organismo y haciéndole perder su capacidad de identificar a amigos y enemigos. El sistema defensivo del organismo pierde al dar la bienvenida a sus atacantes y al destruir a sus defensores. Los sistemas en lucha tienen como referente a la víctima final de la batalla. Su dinámica se interpreta como lucha entre anticuerpos, y como ataque y destrucción de un subsistema que defiende a un organismo –al sistema– y que al ser derrotado muere con el organismo, muere con el sistema de que es parte y cuya vida no alcanzó a defender.

Los juegos de guerra y las estrategias de guerra contrainsurgente o antiterrorista presentan obstáculos parecidos. Obedecen al mismo presupuesto epistemológico. Es uno quien juega a la guerra o quien hace la guerra, así tenga asociados o subordinados. El que juega, o el que manda, mueve a los luchadores virtuales y hasta a los soldados no convencionales, así como a los enemigos espiados, seducidos, sometidos o cooptados. Mueve al propio jugador del videojuego o del juego virtual que ha hecho real. La sofisticación del conocimiento del Gran Jugador y de los científicos que son sus asesores financieros o sus think tanks político-militares provoca un notable conocimiento de la manipulación y esclavización de los demás. También empuja a un extraño desconocimiento de las amenazas que pesan sobre todos los jugadores y de las que también será víctima el Gran Jugador. Los escenarios de guerra pueden incluir fenómenos de inteligencia distribuida, de díadas, de simbiosis, dendritas, nodos y redes, con notables y numerosas interacciones que siempre serán analizadas en función del actor cognitivo, y del sistema al que pertenece, considerado como constante en la defensa y promoción de sus valores e intereses, y naturalmente interesado en ganar la lucha, pero obcecado en creer que es eterno, ignorante de aquello que todos sabemos y de que habló el viejo Hegel cuando dijo que toda cosa natural es mortal y efímera.

El sistema no piensa en su propia muerte o la pospone a un futuro milenario sin historia. Desconoce, descalifica, debilita, confunde, enajena a su opositor. Lo anula como sistema. Y así como los sabios del rey por buena educación no hablan al Rey de su muerte y menos de la muerte de la casa real, así los científicos al servicio de un sistema de dominación y acumulación que se encuentra en situación terminal y que coloca en situación terminal a todos sus vasallos, ni pensar pueden en esa posibilidad, y a su silencio se suman las fiestas y fanfarrias de quienes anuncian que el sistema tiene asegurada la vida, al menos, por un milenio.

La afirmación de Fukuyama de que vivimos el fin de la historia fue recibida como bálsamo divino. Quien juega con los jugadores estimula el desconocimiento y la descalificación de la evolución pasada y actual de las luchas sistémicas y antisistémicas. No sabe ni quiere saber cuál es y será la historia del sistema dominante o del emergente. Rechaza la sola idea de que puede morir a manos del otro y causar su propia muerte y la del otro. E insiste en seguir reinando mientras muestra todos los signos de estarse muriendo, hecho que ocurre en el escenario mundial, como el rey que se muere en el escenario teatral de Simenon.

Hoy mismo, en sus modelos de conflicto y consenso, el sistema en estado terminal impone la negociación para la rendición, y en el mundo realmente existente aumenta sus exigencias y extiende el campo de lo no negociable. Lo no negociable crece y prolifera no sólo en la periferias, sino en el centro del mundo, encabezado por Estados Unidos y la Unión Europea.

La preconcepción del sistema como UNO predomina en las ciencias económicas normales de que Khün hablaba. Predomina en todo análisis que usa como categorías las de el sistema y el contexto, en que aquél insume energía y al que arroja desechos. Se trata de actos neguentrópicos que ya no cumplen esa función y que el investigador, supuestamente funcional al sistema, tampoco ve. Uno y otro se vuelven parte de la entropía que a ambos amenaza y que puede dar nacimiento a la configuración de otro sistema tras una fase de transición al caos y de transición del caos, para ellos inconcebibles, o negados, cuando los llegan a intuir.

Hoy el sistema dominado por la lógica del capital –una lógica de disminución de riesgos e incremento de utilidades para las corporaciones, tanto en la economía como en la guerra– enfrenta conflictos internos y externos con medidas de retroalimentación negativa o positiva.

Las relaciones interactivas de ocupación, depredación, parasitismo, cooperación, corrupción, persuasión virtual y subliminal, terror colectivo, eliminación de resistencias y de formaciones defensivas, aparecen en las simulaciones y escenarios de guerra de espectro amplio, pero aparecen a medias. La realidad histórica que vivimos es mucho más compleja de lo que sus autores imaginan o son capaces de concebir con las informaciones y computaciones que los decision makers les piden para mejorar su capacidad de decidir en función de sus intereses y valores.

El inmenso conocimiento que se ha adquirido sobre el papel del azar y de la organización y reorganización del sistema ha permitido superar la teoría de la selección natural, aunque se le use en lo que es útil. Cuando no es útil se vuelve a las viejas teorías del darwinismo colonialista que invoca las políticas de la eliminación de los más débiles, así conduzcan en menos de cuatro décadas a un genocidio de más de 2 mil millones de habitantes que (otros factores iguales), se van a añadir a los 7 mil millones que hay y en los que la población excluida y desechable, ya llega más de 3 mil millones.

El sistema y muchos de sus científicos atribuyen al excesivo crecimiento de la población los problemas ecológicos que vivimos, y si ese sistema de dominación y acumulación mundial se considera como una constante, la población que debe morir o desaparecer, será del orden de más o menos 5 mil 50 millones, según predicciones demográficas relativamente confiables.

Y aquí surge el gran engaño y autoengaño en medio del gran conocimiento. Como esa aberración hay varias más que caen en el orden de la sicopatología, pero que corresponden a la opción racional de las empresas y sus accionistas mayoritarios y minoritarios. Entre ellos destaca el creer que se puede seguir jugando con las amenazas de guerra nuclear sin que se produzca la guerra de la locura, esto es MAD, siglas que en inglés, claramente se refieren a una guerra de destrucción mutua asegurada. Y existen otros ocultamientos y rechazos que llevan a no hacer nada frente a evidentes y acalladas amenazas, como el cambio climático. Me detengo en éste para aclarar una disertación que parece catastrofista y no lo es, como mostraré más tarde.

En los últimos meses de 2009 y primeros de 2010, es decir, en torno a la reunión de jefes de Estado sobre el cambio climático, se desató una feroz campaña contra los científicos de las antes llamadas ciencias duras. No sólo fue descalificado el informe que presentaron en 2007 sobre ese problema los integrantes de una comisión gubernamental de investigadores, sino fueron descalificados los más de mil científicos que, reunidos en París, confirmaron la validez del informe y añadieron algo más: que había un error en sus predicciones, pues habían subestimado la rapidez y gravedad del cambio climático. El futuro resultó más grave de lo calculado.

El motivo principal de la campaña y la cólera que levantaron los científicos, no se debieron tanto a las predicciones sobre los crecientes daños a la Tierra y a la vida, sino a la tesis ratificada por la comunidad científica internacional de que los cambios climáticos son de origen humano; atropógenos fue la palabra que usaron. Decir sólo eso, y que los propios científicos intergubernamentales lo dijeran, resultó inaceptable para los complejos empresariales-militares-políticos-y-mediáticos que dominan el mundo. Representados por sus jefes de Estado en una reunión que tuvo lugar en Copenhague, destinada a tomar acuerdos vinculantes, los acuerdos fueron dictados por un pequeño grupo de jefes de Estado que se reunió a escondidas en las primeras horas de la madrugada y sin más consulta fueron leídos por el presidente Obama minutos antes de tomar el avión de regreso.

En Copenhague no hubo acuerdos vinculantes. Incluso los pobres compromisos que se habían tomado en Kioto, desaparecieron. La antropología de políticos y científicos no quedó allí. La maquinaria de los ricos y los poderosos se movió para desprestigiar y castigar a los científicos que habían osado decir una verdad que debió alertar a aquéllos sobre las amenazas a su propia vida y que sólo indirectamente los inculpaba al apuntar que ellos y sus megaempresas eran causantes de los peligros que corre la especie humana

Los medios y los publicistas llegaron a tratar a todos los científicos de las ciencias naturales con las descalificaciones a que estamos acostumbrados los de las ciencias blandas, digamos humanas o sociales. Abusando de atrevidos artificios retóricos llegaron a sostener que las ciencias duras ya no son ciencias, y con prepotencia de ignorantes llegaron a decir que los propios científicos reconocen que los domina ¡el principio de incertidumbre!, del que por supuesto no tenían ni la menor idea de lo que es. El mundo de la ciencia respondió de una manera realmente ejemplar. Le dio un impresionante apoyo a sus colegas. En los primeros meses del año las más famosas revistas científicas y de difusión científicas publicaron artículos que defendían las mismas tesis de los científicos estigmatizados. Entre ellas Scientific American y Nature. No se ablandaron. Un gran número de científicos asumió su responsabilidad científica. Lejos de dejarse dominar por sus genes egoístas se vieron más y más atraídos a sostener las verdades sobre medidas que son necesarias para la supervivencia de la especie humana.

Un paso no dieron, sin embargo, que es necesario dar si no se quiere ser copartícipe de la negación más profunda y grave para las ciencias de la materia, de la vida y de la humanidad. Y para la humanidad. El paso que no se dio y que se necesita dar con la mayor seriedad consiste en incluir la categoría del capitalismo como un riguroso concepto científico, no sólo asociado a la ley del valor, sino a la ley de la producción y reproducción de la vida.

Las ciencias de la complejidad que investigan el mundo actual no serán ciencias ni investigarán la complejidad del mundo actual y sus escenarios de futuro si no incluyen el capitalismo, una de sus categorías más profundas, cuyo solo nombre suele ser rechazado instintivamente por no pertenecer al lenguaje políticamente correcto de las ciencias hegemónicas.

Pocas hipótesis tienen tantas posibilidades de ser confirmadas como ésta: La solución a los problemas sociales como problemas científicos y como problemas reales es imposible con el actual sistema de dominación y acumulación capitalista y con la lógica que en él impera. En relación al mismo ya no sólo se plantean las alternativas anteriores de reforma o revolución. Hay otra más que surge tanto de los nuevos movimientos sociales como de los modelos matemáticos sobre sistemas en transición al caos y en transición del caos a un orden llamado emergente o alternativo. Tanto en los movimientos como en los modelos aparecen lo que en estos últimos se llaman atractores y bifurcaciones en que parecería optarse por uno de ellos, así como fractales y formaciones parecidas que se forjan a las más distintas escalas. La atención a la construcción de alternativas en los movimientos sociales y en los modelos de sistemas habrá de dar cabida a las nuevas estructuraciones de la libertad, la democracia, y la justicia social. Con unas y otras será fundamental estudiar cuáles son las alternativas que no sólo permitan construir el buen vivir, sino preservar la vida

En los nuevos movimientos sociales y en los modelos de desarrollo autosustentable destacan por su mayor posibilidad de alcanzar esas metas los modelos de cooperación, de inteligencia distribuida, de control descentralizado, que se articulan con otros de control centralizado y jerárquico sin que se dé en forma metafísica la vieja oposición entre el autoritarismo y la anarquía.

Desde ejemplos como Los Caracoles de los pueblos mayas de Chiapas, por un lado, y por otro, desde investigaciones pioneras y recientes como las de Axelrod y muchos científicos más, estamos hoy en condiciones de construir una utopía a la vez convalidada por la praxis de los pueblos y por los escenarios de las computadoras, esa que Emmanuel Wallernstein bautizó como utopística y que definió como la ponderación seria de las alternativas históricas, la evaluación serena, racional y realista de los sistemas sociales humanos, de sus limitaciones y posibilidades. Vale la pena pensar en ella y luchar por ella.

domingo, 13 de noviembre de 2011

De la guerra sucia -II

"El arte de la guerra es de importancia vital para el Estado. Es asunto de vida o muerte... De aquí que sea asunto que merece estudio y que bajo ninguna circunstancia debe descuidarse" Sun Tzu


Historias de guerra sucia llenas de terror y de mentira.

Escribíamos en la primera entrega de esta serie de artículos dedicados a la guerra sucia que la contrainsurgencia no es una lucha centrada en lo militar sino una lucha integral que reparte sus operaciones en lo político, en lo económico, en lo religioso, en lo ideológico, en lo cultural, lo que la caracteriza como una guerra total, una guerra integral. Dichas operaciones contrainsurgentes, en el marco de la guerra sucia, buscan ante todo la derrota moral del contendiente. Nestor Kohan, en su libro Pensar a Contramano, explica que el viejo general Karl Von Clausewitz visualizó que en todo conflicto no sólo se producen bajas humanas y materiales (fundamentalmente armas) sino también bajas morales. Para derrotar definitivamente a un contendiente, explica Nestor Kohan siguiendo a Clausewitz, hay que desarmar no sólo materialmente sino también moralmente al oponente. Hay que destruirlo como sujeto. Hay que derrumbarle sus convicciones, no sólo su armamento. Y sobre todo hay que minar la resistencia moral de la juventud, de los posibles nuevos contendientes.

En esta segunda entrega sobre la guerra sucia pretendemos reseñar algunas historias de guerra sucia con la intención de reconocer sus constantes y sus particularidades, para aprender, tal como lo sugiere el manual de contrainsurgencia del pentágono (2009) y adquirir así la capacidad de combatirla y derrotarla. Esté artículo no pretende ser exhaustivo sino solamente dar algunos ejemplos de países donde la guerra sucia se ha dejado sentir con toda crudeza.


Operaciones psicológicas, ideológicas y culturales.


-Guatemala. Según el manual de operaciones psicológicas del Ejército guatemalteco escrito para aniquilar la subversión interna en los años 80's, las "operaciones psicológicas pueden definirse como el uso planeado de la propaganda y otras acciones designadas para influenciar en las emociones, actitudes, opiniones o conducta de grupos de personas, de manera que se apoye la consecución de los objetivos nacionales... las operaciones psicológicas no son más que la explotación deliberada de las emociones humanas: miedo, esperanza y aspiraciones, para vencer al enemigo y como tal, es una parte del arte de la guerra... sus medios son el ardid y la sorpresa y su desarrollo el pánico o el terror ...". En Guatemala estas operaciones estuvieron dirigidas a lograr un efectivo control y manejo de la población. Algunos medios utilizados para la ejecución de estas operaciones fueron los volantes y panfletos escritos, las radios comerciales y la televisión. Sin embargo, lo que más intimidó y aterrorizó a la población fue la bocina altoparlante, sobre todo cuando era utilizada desde un helicóptero. En muchas operaciones militares este procedimiento precedió a la comisión de masacres, o se verificaron durante ataques a personas desplazadas y bombardeos a aldeas de civiles, entre otras.


-Cuba. Durante más de 50 años el imperialismo yanqui ha tratado de destruir la moral que durante tanto tiempo ha permitido a los cubanos llevar adelante una revolución socialista -con todos los aciertos y errores que ha tenido. En 1961 intentaron invadirla desembarcando en Bahía de Cochinos y pronto salieron derrotados con la cola entre las patas. Pero este evento de gran importancia histórica no ha sido el único. Entre las muchos agresiones de guerra sucia que Estados Unidos ha emprendido contra cuba, tal vez el más importante sea la que realizan a nivel psicológico, ideológico y cultural las radiodifusoras que transmiten desde Maimi. En la actualidad trasmiten contra Cuba un total de 15 emisoras, a través de 34 frecuencias, para sumar un total de 2348 horas semanales. En el Plan Bush, recientemente descongelado por Obama está previsto aumentar el financiamiento a la subversión interna para lo cual se asignaron 80 millones de dólares. 24 millones para propaganda anticomunista, incluido internet pirata para blogueros como Yoani Sanchéz. 15 millones de apoyo a los esfuerzos internacionales para la subversión en cuba y otros tantos para la “planificación de la transición” al capitalismo neocolonial. Esta guerra sucia tiene un signo marcadamente ideológico pues pretende introyectar los valores individualistas del capitalismo en la conciencia de crisis que permea en los cubanos, ante la dura realidad económica con la que han estado viviendo los últimos 20 años. Es decir, pretende derrotar moralmente al pueblo trabajador cubano para así avanzar en una intervención militar para destruir/despoblar y reconstruir/reordenar Cuba. Para contrarrestar dichas operaciones contrainsurgentes, a finales de la década de los 90's y en medio del conflicto suscitado por la exigencia de repatriación del niño Elian González, el gobierno cubano puso en marcha lo que llamó “La batalla de las ideas”. La idea de esta campaña era realizar obras sociales en el campo de la salud, la cultura y la educación con la intención de fortalecer ideológicamente la conciencia del pueblo cubano en su lucha contra el terrorismo yanqui y por la defensa de la Revolución. En este sentido, con todo y que el imperio Yanqui ha conseguido apoyo de un pequeño sector de la población, es importante destacar que el pueblo trabajador cubano mantiene firme su decisión de defender su soberanía e independencia, lo que en otras palabras significa, asumir su responsabilidad histórica para profundizar la revolución socialista que han llevado adelante por tantos años.

Más información sobre la guerra sucia contra cuba pueden encontrarla en el portal las Razones de Cuba. http://razonesdecuba.cubadebate.cu/


Operaciones de castigo y de extrema crueldad (canibalismo, tortura sexual, masacres)

-Guatemala. Las operaciones de castigo perseguían, mediante el uso de la violencia y la propagación del terror, infligir un castigo a las comunidades para inhibir cualquier intento de apoyo a la insurgencia. Cuando era detectada la presencia de la guerrilla en un área o se tenía conocimiento de la realización de una acción guerrillera, el Ejército se hacía presente en el lugar o en alguna población cercana y efectuaban una acción violenta contra la población civil. Acciones que en centenares de ocasiones han de caracterizarse como Actos de extrema crueldad. Durante el desarrollo de las operaciones contra insurgentes, el Ejercito cometió numerosas violaciones de los derechos humanos: En algunos de estos hechos se cometieron actos de extrema crueldad, con el evidente propósito de provocar en la población un mayor grado de terror del que habitualmente se causaba durante las incursiones. Estos actos fueron realizados por el Ejército, en forma pública, en las comunidades; o bien, dejaron rastros o huellas de estos hechos para que la población tomara conocimiento de ellos, una vez realizada la incursión militar, aumentando en ambos casos el efecto de propagar el terror en las comunidades. Estos casos registrados se refieren a actos de canibalismo, es decir, donde los agresores comieron miembros o vísceras de sus víctimas u obligaron a las víctimas a beber su propia sangre o miembros. La comisión de estas acciones refleja claramente el propósito de sembrar un "terror ejemplificante" para obtener la forzada colaboración de las comunidades con el Ejército y disuadir en ellas cualquier intento de apoyo a la guerrilla.

-Ex-Yugoslavia. El caso de la guerra en la Ex-Yugoslavia, es un caso particularmente aterrador. Aprovechándose de contradicciones étnicas y religiosas, los señores de la guerra exacerbaron un conflicto hasta llevarlo a un punto de no retorno, donde la población civil y particularmente las mujeres, fueron las más afectadas. Atroces crímenes de guerra fueron cometidos. Un ejemplo, de los muchos que se sucedieron en esta guerra por parte de todos los bandos en pugna, fue el de la violación masiva de mujeres musulmanas en Bosnia-Herzegovina. Entre 1992 y 1995 el ejército y paramilitares serbios implantaron como táctica de guerra la violación sistemática de mujeres. Grupos de derechos humanos pronto descubrieron que la violación de mujeres bosnias musulmanas era parte de un esfuerzo por "limpiar" de musulmanes la región. Miles de mujeres fueron torturadas y violadas salvajemente. Algunos cálculos hablan de entre 30 mil y 50 mil mujeres y niñas violadas por soldados serbios (oficiales y/o mercenarios) en todo el país. Muchas de ellas fueron violadas y mutiladas frente a sus esposos, padres e hijos.

La tortura sexual, como arma de guerra, como forma de destruir la moral de los oponentes, es a todas luces un crimen de lesa humanidad. El caso de la ex-Yugoslavia es paradigmático por la cantidad de mujeres que fueron torturadas sexualmente, sin embargo, diversos estudios han demostrado que las torturas sexuales contra mujeres y niñas han sido utilizadas en un sin número de conflictos bélicos e incluso como táctica represiva por parte de dictaduras militares. Lo mismo en Chile, que en Argentina, que en Guatemala, o en Guerrero, y en Atenco, la tortura sexual ha estado presente. Sin embargo, no ha sido suficientemente tipificada como una táctica de la guerra sucia, por lo que no ha sido reconocida la necesidad de combatirla y castigarla.

Pero la tortura sexual no solamente se aplica contra mujeres, sino también contra hombres. En 2005 se supo que decenas de presos musulmanes (hombres) capturados en Afganistan e Irak y recluídos en Guantánamo, habían sido torturados sexualmente. Erik Saar, ex sargento del ejército y traductor árabe trabajando con las fuerzas armadas estadounidenses en Guantánamo, ha expuesto en entrevista para el New York Times el uso de las mujeres como parte de las tácticas de interrogación de detenidos sospechosos de ser "terroristas". Erik Saar cuenta el caso de una interrogadora que se empezó a desvestir frente a un detenido, quitándose la blusa para revelar una camiseta muy pegada al cuerpo, y empezó a tocarse los senos, frotándolos contra la espalda del detenido y comentando sobre su aparente erección. El detenido le escupió a la cara, la mujer salió y regresó poco después para decirle al preso que estaba menstruando, puso sus manos dentro de su pantalón, y sacó lo que parecía sangre, pero en realidad era tinta roja, y se la embarró en la cara. El detenido gritó, escupió y finalmente empezó a llorar. Quebró su moral religiosa que lo impulsaba a pelear, y es que según el autor, la ley islámica prohíbe contacto físico con mujeres fuera de la familia, y en particular con cualquiera que esté menstruando.

La tortura sexual hace uso del dolor y del placer para poner en crisis los valores y creencias, incluso íntimas, de los individuos, para así poder doblegarlos, humillarlos, e intentar asestarles una derrota moral. Otro ejemplo del uso de la tortura sexual para infringir una derrota moral al oponente es el reciente caso del asesinato y violación del ex-líder libio Muamar Gadaffi.


Operaciones encubiertas, de inteligencia y paramilitarismo


-Guatemala. Operaciones encubiertas. Dentro de las operaciones contrainsurgentes, las encubiertas se caracterizaron por la utilización de técnicas clandestinas y de engaño a la población civil. En determinadas incursiones, el Ejército actuó uniformado como la guerrilla, utilizó armas similares, vehículos civiles y perpetró graves violaciones de los derechos humanos. El objetivo de este tipo de operaciones era evitar ser identificados como integrantes del Ejército y culpar a las organizaciones guerrilleras, engañando al menos inicialmente a la comunidad nacional e internacional.

Operaciones de inteligencia. Las operaciones de Inteligencia se desarrollaron en las áreas rurales y urbanas dentro del marco convencional de obtención de la información. Estas se realizaron a través de operaciones clandestinas, con modus operandi irregulares y precisos. La confección de listas negras, la tortura, las desapariciones y otras violaciones causadas por la Inteligencia, formaron parte de estas operaciones.

-Irak. A finales de 2010 Wikileaks reveló 400 mil documentos del Ejército de Estados Unidos en el que se detallan centenares, miles, de abusos, asesinatos y torturas realizados cotidianamente tanto por el ejército yanqui, como por el ejército iraquí (a cargo del nuevo gobierno), así como por unidades militares compuestas por mercenarios, decenas de ellas pertenecientes a la compañía de seguridad Blackwater, que actualmente labora bajo el nombre U.S Training Center. Los documentos revelados por wikileaks hacen posible contabilizar que al menos 80% de los caídos en Irak han sido civiles. Aun peor, esas muertes no han sido producto de grandes bombardeos sino de acciones cotidianas, sistemáticas, por parte de las fuerzas de ocupación.

El periodista independiente Shane Bauer dio a conocer en 2009 la existencia de escuadrones de la muerte en Iraq Bauer escribió: “Las Fuerzas de Operaciones Especiales de Iraq (ISOF, en sus siglas en inglés) son probablemente el mayor equipo de fuerzas especiales creado nunca por Estados Unidos y está libre de los muchos controles que la mayoría de los gobierno utilizan para frenar a semejantes fuerzas letales. El proyecto empezó en los desiertos de Jordania en abril de 2003. Ahí las Fuerzas Especiales del Ejército estadounidense, o “Boinas Verdes”, adiestraron a varios iraquíes la mayoría de ellos de 18 años sin experiencia militar. La brigada resultante fue un sueño de los Boinas Verdes hecho realidad: una unidad mortífera, de élite y encubierta equipada completamente con material estadounidense que podría operar durante años bajo mando estadounidense y no estaría bajo la responsabilidad de los ministerios iraquíes ni del proceso político normal. Las ISOF cuentan al menos con 4.564 agentes, con lo que aproximadamente tiene el mismo tamaño que las Fuerzas Especiales del Ejército Estadounidense en Iraq”.

En un boletín emitido por IraqSolidaridad en 2006 sobre los escuadrones de la muerte, se afirma que tras los escuadrones de la muerte se encuentra el ministerio del interior, el ejército iraquí y las fuerzas de ocupación. Testigos, relata el artículo, afirman que han visto convoyes de hombres fuertemente armados, enmascarados y vestidos de negro, circulando con coches caros y modernos y en todoterrenos, insultando particularmente a los sunníes, disparando al aire y clamando venganza, atacando a personas y propiedades, secuestrando a personas o golpeándolas hasta la muerte. "Los nombres de Brigada Lobo, Trueno, Tigre, Imam Alí, Imam Huseín, Escorpión, Volcán se han convertido en nombres familiares de los comandos de las brigadas de la policía, en árabe: Maghawee. Supuestamente son comandos de actuación contra la resistencia, tropas de inteligencia en suma. Fueron creados, entrenados, armados y dirigidos por oficiales de inteligencia estadounidenses bien conocidos por haber prestado servicio en América Central y Sudamérica, donde los Escuadrones de la muerte fueron una parte fundamental de la escena política. Los Maghaweer fueron tan brutales que una de las personalidades prominentes iraquíes opuesta a la ocupación afirma que las cárceles estadounidenses son más clementes que las iraquíes."

El modo de actuar de los escuadrones de la muerte en irak, nos recuerda por mucho a lo que ahora sucede en México y antes sucedió en centroamérica (más adelante hablaremos de ello) y para muestra un botón: Relata el boletín de IrakSolidaridad de 2006 al que nos hemos referido antes: "En la provincia occidental de al-Anbar los asesinatos son tantos que se obvian dar los pésames, mientras que Ramadi -su capital- lleva asediada meses. En Diyala, al este de Bagdad, el descubrimiento de decenas de cuerpos mutilados en zonas aisladas ya ha dejado de ser noticia: esta semana, hombres armados dieron el alto a un autobús de pasajeros; obligaron a los 25 niños, a los ancianos y a los estudiantes a bajar y les tirotearon uno a uno". "Las familias tienen miedo de que las vean en la morgue o en los hospitales para recoger el cuerpo de su hijo asesinado debido a las milicias armadas que podrían estar camufladas a la vuelta de la esquina. Cabezas de jóvenes ruedan por las calles de Bagdad como si fueran sandías: fueron secuestrados cerca de la morgue".

La guerra en Irak inició en 2003. Han pasado 8 años y no hay visos de que la guerra pronto termine. Más aun, conforme la guerra continúe, es muy probable que resurja una moral (antiimperialista) que abone en la creación de una fuerza política, civil y militar, que cuestione la ocupación yanqui y que incluso pueda asestar severos golpes al ejército invasor, tal como actualmente sucede en Afganistan, 10 años después de la caída de las torres gemelas y la consecuente invasión contra ese país.

A continuación reproducimos algunos puntos destacados de la Guía de contrainsurgencia para Irak escrita por el comandante de la fuerza multinacional David Petreus:

Guía de Contrainsurgencia del Comandante de la Fuerza Multinacional-Irak*

General (USA) David H. Petraeus.

• Proteger y servir a la población.

• Convivir con la población. No puede vivir lejos de la zona de combate. Ubique, estratégicamente, puestos conjuntos de seguridad, puestos de combate avanzados y bases de patrulla en los vecindarios que pretendemos proteger. Convivir con la población es esencial para resguardarla y derrotar a los insurgentes.

• Ocupar las áreas que se hayan asegurado. Una vez que despejemos un área, tenemos que ocuparla y retenerla.

• Perseguir implacablemente al enemigo. Identifique y persiga. No les permita conservar áreas de apoyo ni refugios. Obligue al enemigo a reaccionar ante nuestras operaciones. Niegue al enemigo la capacidad de planear y llevar a cabo operaciones premeditadas.

• Usar todo recurso para aislar y derrotar a los terroristas e insurgentes.

• Derrotar la red, no sólo el ataque. Concentre sus esfuerzos en los culpables de la explosión. Empleé recursos de inteligencia para identificar la red detrás de un ataque y persiga a sus líderes, especialistas en explosivos, financieros y operadores.

• Pelear en una categoría de peso superior al propio. Esfuércese por ser "más grande de lo que es en realidad". Participe en operaciones con unidades militares y policíacas iraquíes y utilice los Hijos de Irak, contratistas y al pueblo iraquí para llevar a cabo tareas rutinarias en las bases de operaciones avanzadas, bases de patrulla y puestos conjuntos de seguridad, liberando, de esta manera, a nuestros soldados para concentrarse en las tareas fuera de la guarnición.

• Luchar por obtener información de inteligencia. Un entendimiento matizado de la situación constituye el todo. Estudie la información de inteligencia que se recolecta, compártala y empéñese para obtener más. Cada patrulla debe contar con tareas concebidas para mejorar el entendimiento del área de operaciones y del enemigo. Opere con base en tener que "compartir" en lugar de tener que "saber". Difunda la información de inteligencia, lo más pronto posible, a todos los que puedan beneficiarse de la misma.

• Caminar. Desplácese en vehículos, pero trabaje a pie. Deténgase, no sólo pase por un área. Haga su patrullaje a pie e interactúe con la población.

• Familiarizarse con el vecindario. Trace un mapa del factor humano y estúdielo detenidamente. Comprenda la cultura e historia del lugar. Aprenda sobre las tribus, líderes formales e informales, las estructuras gubernamentales, elementos religiosos y las fuerzas de seguridad en el área de operaciones.

• Cultivar relaciones. Las relaciones constituyen un elemento crucial en las operaciones de contrainsurgencia. Junto a nuestros homólogos iraquíes, luche por establecer vínculos productivos con los líderes del lugar, jeques tribales, oficiales gubernamentales, líderes religiosos y socios interagenciales.

• Manejar las expectativas. Sea cauteloso y prudente al anunciar adelantos. Analice lo que se ha logrado, pero también esté consciente de lo que hace falta hacer.

• Pelear implacablemente la guerra de información. Dése cuenta de que estamos en una lucha por la legitimidad que se ganará o perderá según la percepción del pueblo iraquí. Cada medida tomada por el enemigo y nuestras fuerzas inciden en el teatro de la opinión pública. Elabore y sostenga un relato eficaz y dirija permanentemente las ideas centrales hacia el objetivo a través de todas las formas posibles de medios de comunicaciones.

• Prepararse y aprovechar las oportunidades. "La suerte es lo que se da cuando la preparación se junta con la oportunidad." (Seneca el Joven) Elabore conceptos (tales como los elementos "reconciliables" y los "irreconciliables") previendo posibles oportunidades, y esté listo para correr el riesgo necesario a fin de aprovecharse de las mismas.

• Aprender y adaptarse. Evalúe permanentemente la situación y ajuste las tácticas, políticas y programas según sea necesario. Comparta las ideas eficaces. Evite la pereza mental o física. Jamás olvide que si hoy algo funciona en un área podría no funcionar mañana en la misma y lo que funciona en un área podría no funcionar en la otra. Concentre sus esfuerzos en garantizar que nuestras unidades sean organizaciones en un proceso continuo de aprendizaje. En la contrainsurgencia, los que aprenden y se adaptan más rápido obtendrán ventajas significativas.

*Fuente: Military Review, enero-febrero 2009



Operaciones de aniquilamiento, control y desplazamiento de población


-Guatemala. La guerra sucia en Guatemala, como en otros países, se inscribió dentro de la Doctrina de Seguridad Nacional. El ejército guatemalteco definía así al enemigo interno: "Enemigo interno son todos aquellos individuos, grupos u organizaciones que por medio de acciones ilegales, tratan de romper el orden establecido, representados por los elementos que siguiendo consignas del comunismo internacional, desarrollan la llamada guerra revolucionaria y la subversión en el país", así como a "aquellos individuos, grupos u organizaciones que sin ser comunistas tratan de romper el orden establecido". Según dicho informe, las principales operaciones contrainsurgentes ejecutadas por el ejército, fueron tres: operaciones de aniquilamiento, tierra arrasada, de desplazamiento, de castigo, de control y de aniquilamiento de población civil; acciones militares encubiertas, de Inteligencia y operaciones psicológicas. A continuación nos referiremos a algunas de ellas.

Operaciones de aniquilamiento se realizaron contra de los Comités Clandestinos Locales (CCL), las Unidades Militares Permanentes de la guerrilla (UMP) y Comunidades de Población en Resistencia, (CPR). Dichas operaciones tenían la intención de eliminar a los dirigentes comunitarios que eran enlace entre la guerrilla y la base social.

Operaciones de tierra arrasada. Las operaciones de aniquilamiento se extendieron en su aplicación táctica a la población civil que no estaba involucrada en el enfrentamiento, arrasando aldeas, matando indiscriminadamente a los habitantes de las comunidades por el solo hecho de ser sospechosos de pertenecer o de colaborar con la guerrilla, o por interferir en sus operaciones militares. Estas acciones fueron complementadas con la quema de plantaciones, cosechas, viviendas y en general con los bienes de las personas"

Operaciones de desplazamiento de población. La eliminación de la población civil a través de desplazamientos forzados permitió mantener ciertas áreas de operaciones "limpias" de población civil. Mediante estas incursiones el Ejército pretendía eliminar el supuesto apoyo de la población civil a la guerrilla y facilitaba la identificación de los guerrilleros o sus colaboradores. "Guerrillero visto, guerrillero muerto" era una de las consignas enseñadas a los soldados. Los desplazamientos fueron consecuencia de las más violentas operaciones militares contrainsurgentes: masacres y tierra arrasada. El desplazamiento forzado fue una de las causas de mayor sufrimiento a la población civil.


La guerra sucia, una guerra capitalista de exterminio: el caso colombiano


-Colombia. Si existe un país en América Latina donde la guerra sucia se haya mantenido permanente y manifestado con extrema crueldad, incluso peor de lo que se vivió en Guatemala y El Salvador, es, sin duda alguna, Colombia. 50 años de guerra contrainsurgente han dejado un saldo de miles de desaparecidos, ejecutados, cientos de masacres, bombardeos de poblaciones, fosas comunes, crematorios clandestinos, represión masiva, desplazamientos forzados, etc.

La guerra sucia en Colombia, en lo general, se ha expresado en al menos dos formas principales:

La guerra sucia "legal" ejecutada mediante montajes judiciales contra líderes sociales (estudiantiles, sindicales, etc.) y contra comunidades en resistencia. Miles son los presos políticos que se pudren en las cárceles colombianas.

La guerra sucia "ilegal" ejecutada tanto por fuerzas militares como (narco)paramilitares, y que al igual que en Guatemala, se ha visto expresada en operaciones de aniquilamiento, desplazamiento, de castigo... Sobre el particular está documentado que los paramiltares han sido patrocinados por empresas trasnacionales como Chiquita Brands, Repsol, BP, OXY, United Fruits entre otras, mientras que en el caso del ejército colombiano, su principal proveedor de armas, dinero y entrenamiento han sido los Estados Unidos (por medio de planes contrainsurgentes como el Plan colombia, el Plan patriota, etc.) e Israel.

Es el caso colombiano el que ha permitido con más claridad definir que el terrorismo de estado y la guerra sucia son una y la misma cosa, puesto que mediante la guerra sucia se manifiesta la voluntad del estado para obtener a cualquier precio la derrota de la "subversión interna" (guerra de exterminio). De esta manera "el estado colombiano ha dado rienda suelta a toda clase de atrocidades para lograr supuestos éxitos militares". Cómo dice el compañero José Antonio Gutierrez, "el Estado colombiano es un Estado terrorista, que secuestra, desaparece, asesina, forma escuadrones de la muerte, desplaza, fumiga (envenena), bombardea, amenaza, acosa, espía, organiza arrestos masivos (pescas milagrosas del Estado), tortura."

En cuanto al paramilitarismo ("insurgencia anticomunista" en la DSN), Colombia puede ser considerada un paradigma en el tema. Incluso recientemente se ha dado a conocer que en Colombia ha sido descubierta la mayor fosa común del continente en la que presuntamente están enterrados al menos 2000 personas, todas ellas víctimas principalmente de los paramilitares. Azalea Robles define así la actuación de los paramilitares en Colombia: "El Paramilitarismo es una herramienta del Estado colombiano, creada por y según recomendación de la CIA, con formadores estadounidenses y del Mossad, y financiado para sus masacres por el Estado, los latifundistas, y las multinacionales (Repsol, BP, OXY, United Fruits entre otras). La razón de haber creado el paramilitarismo es la neutralización de la reivindicación social: en todas sus expresiones. Por ello Colombia es el lugar más peligroso del mundo para ejercer la actividad sindical; por ello los estudiantes son asesinados, incluso en las universidades, por ello son asesinados los líderes campesinos, por ello son desaparecidas decenas de miles de personas por la Herramienta paramilitar: para acallar reivindicaciones."

Y es que "El 68% de la población de Colombia vive en la pobreza e indigencia. La concentración de la riqueza es escandalosa: Colombia es el 11º país con más desigualdad social del mundo (coeficiente GINI), y es el país más desigual del continente americano. Hay 8 millones de indigentes y 20 millones de pobres. Mueren anualmente más de 20 mil niños menores de 5 años por desnutrición aguda (cifras UNICEF), de cada 100 madres desplazadas gestantes, 80 padecen desnutrición crónica. Simultáneamente, y correlativamente a esta miseria, un solo banquero, Sarmiento Angulo, controla el 42% del crédito nacional y declaró ganancias de 1.250 millones de dólares en el último bimestre de 2009."

Pero no sólo eso, Colombia también es ejemplo, para otros estados asesinos, de cómo mantener un sistema criminal en pie. A continuación un breve recuento de daños por el terrorismo de estado en Colombia:

- 250 mil desaparecidos

- La eliminación física de todo un partido político, La Unión Patriótica (UP), más de 5.000 personas de la UP asesinadas por el Estado.

- más de 4 millones de personas desplazadas de sus tierras mediante las masacres de los militares y sus paramilitares, dentro de la Estrategia Estatal de “tierra arrasada”, para vaciar el campo de población y ofertar así a las multinacionales terrenos de alto interés económico, baldíos de reivindicaciones y habitantes;

- 6 millones de hectáreas de tierra han sido así robadas a las víctimas y desplazados, y ofertadas a multinacionales, gran latifundio, y nuevos gamonales paramilitares, ahora el escándalo del “agro ingreso seguro”, viene a consolidar este robo a las víctimas

- más de 4200 fosas comunes (denunciadas) con miles de cadáveres de colombianos masacrados por el paramilitarismo del Estado colombiano.

- más de 2649 sindicalistas asesinados

- más de 7.500 presos políticos, muchos de ellos víctimas de montajes judiciales en los que se les acusa de narcotráfico, terrorismo, etc.

- miles de ejecuciones extrajudiciales, entre ellas el escándalo de los “falsos positivos”: los militares raptan a muchachos y muchachas jóvenes, los disfrazan de guerrilleros y los asesinan, y presentan los cadáveres a los mass-media, para “mostrar resultados” en su guerra anti-insurgente, y también para asesinar a los civiles que les incomodan.

- centenares de auto atentados con coches bomba y similares con la intención de desprestigiar la acción guerrillera.

En Colombia la estrategia guerrerista de los gobiernos en turno ha tenido amplios frutos, por un lado el exterminio del pueblo trabajador colombiano que lucha por su liberación, y por otro lado, una cierta derrota moral al conjunto de la población que le impide dar un salto cualitativo en su organización y resistencia para lograr así asestarle una derrota histórica al capitalismo, lo que sin embargo, no ha evitado que la rebeldía se siga expresando en todos los rincones de la geografía colombiana.

...

Podríamos seguir dando cuenta de otros países que han sido víctimas de guerra sucia: Perú, Estados Unidos, Argelia, Indochina, Vietnam, Chile, Iran, Venezuela, Ecuador, España, Italia, Sudáfrica, Egipto, Sudán, Cada conflicto puede realizarse como un nuevo laboratorio de guerra sucia del que pueden obtenerse experiencias que más temprano que tarde serán puestas en marcha en otros lugares. Revisar las constantes tácticas y estratégicas, reconocer las vulnerabilidades, identificar los agentes de guerra sucia debe ayudarnos para enfrentar con mayor eficacia las embestidas criminales de los estados y las trasnacionales, y sobre todo a tipificar lo que es la guerra sucia (contrainsurgencia, paramilitarismo, contraterrorismo). Esas constantes son: uso del miedo, del terror, comisión de actos de extrema crueldad, masacres, genocidios, delitos de lesa humanidad, participación y apoyo de potencias imperialistas (particularmente EU) en la lucha contra la subversión interna, mentira, desapariciones, torturas, tortura sexuales, desplazamiento de población, aniquilamiento de líderes rebeldes, espionaje, persecución, asesinato de periodistas, impunidad, montajes judiciales, ejecuciones extrajudiciales, presos políticos, participación de fuerzas militares y paramilitares en la guerra sucia, el respaldo de grupos de derecha, empresas trasnacionales, etc.

La guerra sucia como estrategia dentro de la guerra total busca ante todo derrotar moralmente al oponente, así como a sus bases civiles. Para ello la guerra sucia siembra desconfianza, miedo, terror, desorganización, conflicto, duda, pero sobre todo, busca, como dice Nestor Kohan, derrumbar las convicciones para que otros posibles combatientes ni siquiera piensen en involucrarse en la lucha. Pero eso no es todo, la guerra sucia, por sobre otros objetivos, busca principalmente hacer posible el control de territorio para implementar megaproyectos económicos neoliberales. Las Farc-Ep en un comunicado de 2008 afirman, sin lugar a dudas, que la contrainsurgencia es también un instrumento de la globalización capitalista, siendo precisamente el caso colombiano un caso paradigmático para ejemplificar porque la guerra sucia es una guerra de exterminio capitalista: "Es la herramienta de guante de terciopelo blanco o de mano ensangrentada que garantiza la expansión de los intereses capitalistas, de los intereses de las multinacionales, artífices de la industria productora de armas, de la industria química y farmacéutica, del llamado bio-comercio, y desde luego, del negocio multinacional del narcotráfico y todos los circuitos legales e ilegales que éste activa. Es la herramienta de garantía de la configuración actual de las relaciones internacionales de la globalización capitalista, de los acuerdos leoninos extendidos con el Fondo Monetario y del neoliberalismo en general con su economía política de la guerra, con sus tentáculos económicos, jurídicos, políticos, propagandísticos, etc. que reeditan con mayor encono los conceptos de guerra interna ya conocidos en experiencias como el Plan LASO (Latin America Security Operation) de los años sesenta, pero ahora empotrados sobre nuevos presupuestos en cuanto a las justificaciones de la intervención. Y el contexto regional de la intervención norteamericana utiliza hoy todas las más avanzadas tecnologías de la guerra (“inteligencia tecnológica de punta”, armamento moderno, entrenamiento y uso de “fuerzas de despliegue rápido”, entre otros), y la guerra mediática, que apunta a deslegitimar la resistencia heroica de las guerrillas y de los luchadores populares propalando la falsa, peregrina y aviesa tesis que considera la degradación como rasgo esencial de sus opositores, argumentando pérdida del propósito político altruista del lado insurgente e ideando de paso falsas acusaciones para llevar a sus estrados judiciales asqueantes, mediante la extradición, que es entrega de la soberanía, a los revolucionarios, tal como ha ocurrido en el caso de los digno guerrilleros bolivarianos Sonia y Simón Trinidad". Es decir, la guerra sucia no busca en última instancia (o solamente) el aniquilamiento del enemigo, ni la derrota moral del mismo, sino principalmente asegurar la continuación hegemónica e impositiva de la dinámica capitalista de despojo, desprecio, represión y explotación, ejes sobre los que el capitalismo va destruyendo el planeta y oprimiendo a los seres humanos. En este sentido, la guerra sucia ha sido siempre un instrumento de conquista, y de colonialismo (interno y externo) que los grupos de poder han decidido poner en marcha para asegurar la reproducción del capital, asegurar el acrecentamiento de sus riquezas, así como asegurar la enajenación y explotación permanente y constante de miles de personas en el mundo. Es decir, toda guerra sucia es una guerra de exterminio. Toda guerra de exterminio es una guerra contra la humanidad misma.

La siguiente entrega será dedicada a la guerra sucia en México.

Gracias

Noviembre 2011

De la guerra sucia - I

En recuerdo de Pavel, Alexis, Carlos, Fernando, Soren, Verónica, Juan y de todxs nuestros muertxs caídos en la guerra sucia.

De la guerra en general y de la guerra sucia en particular.


El Subcomandante Insurgente Marcos, jefe militar del EZLN, en un reciente escrito sobre la geografía de la guerra moderna, apuntaba lo siguiente:

"Si el aspecto físico lo referimos a un ejército, es decir, a una organización armada, mientras más fuerte es (es decir, mientras más poder de destrucción posee), más posibilidades de éxito tiene.

Si es el aspecto moral referido a un organismo armado, mientras más legítima es la causa que lo anima (es decir, mientras más poder de convocatoria tiene), entonces mayores son las posibilidades de conseguir sus objetivos.

El concepto de guerra se amplió: se trataba de no sólo de destruir al enemigo en su capacidad física de combate (soldados y armamento) para imponer la voluntad propia, también era posible destruir su capacidad moral de combate, aunque tuviera aún suficiente capacidad física.

Si las guerras se pudieran poner únicamente en el terreno militar (físico, ya que en esa referencia estamos), es lógico esperar que la organización armada con mayor poder de destrucción imponga su voluntad al contrario (tal es el objetivo del choque entre fuerzas) destruyendo su capacidad material de combate.

Pero ya no es posible ubicar ningún conflicto en el terreno meramente físico. Cada vez más es más complicado el terreno en el que las guerras (chicas o grandes, regulares o irregulares, de baja, mediana o alta intensidad, mundiales, regionales o locales) se realizan."

[...]

"Pero la sentencia estaba dada para las guerras “más modernas” o “posmodernas”: son posibles conflictos militares que, por su naturaleza, sean irresolubles en términos de fuerza física, es decir, en imponer por la fuerza la voluntad al contrario.

Podríamos suponer entonces que se inició una lucha paralela SUPERIOR a las guerras “convencionales”. Una lucha por imponer una voluntad sobre la otra: la lucha del poderoso militarmente (o “físicamente” para poder transitar al microcosmos humano) por evitar que las guerras se libraran en terrenos donde no se pudieran tener resultados convencionales (del tipo “el ejército mejor equipado, entrenado y organizado será potencialmente victorioso sobre el ejército peor equipado, entrenado y organizado”). Podríamos suponer, entonces, que en su contra está la lucha del débil militarmente (o “físicamente”) por hacer que las guerras se libraran en terrenos donde el poderío militar no fuera el determinante.

Las guerras “más modernas” o “posmodernas” no son, entonces, las que ponen en el terreno armas más sofisticadas (y aquí incluyo no sólo a las armas como técnica militar, también las tomadas como tales en los organigramas militares: el arma de infantería, el de caballería, el arma blindada, etc.), sino las que son llevadas a terrenos donde la calidad y cantidad del poder militar no es el factor determinante.

Con siglos de retraso, la teoría militar de arriba descubría que, así las cosas, serían posibles conflictos en los que un contrincante abrumadoramente superior en términos militares fuera incapaz de imponer su voluntad a un rival débil."

[...]

"Sin embargo, la guerra está ahí y sigue ahí su cuestión central: la destrucción física y/o moral del oponente para imponer la voluntad propia, sigue siendo el fundamento de la guerra de arriba.

Entonces, si la fuerza militar (o física, reitero) no sólo no es relevante sino que se puede prescindir de ella como variable determinante en la decisión final, tenemos que en el conflicto bélico entran otras variables o algunas de las presentes como secundarias pasan a primer plano.

Esto no es nuevo. El concepto de “guerra total” (aunque no como tal) tiene antecedentes y ejemplos. La guerra por todos los medios (militares, económicos, políticos, religiosos, ideológicos, diplomáticos, sociales y aún ecológicos) es el sinónimo de “guerra moderna”.

Pero falta lo fundamental: la conquista de un territorio. Es decir, que esa voluntad se impone en un calendario preciso sí, pero sobre todo en una geografía delimitada. Si no hay un territorio conquistado, es decir, bajo control directo o indirecto de la fuerza vencedora, no hay victoria."


[...]

"Sí, las guerras ahora no se conforman con conquistar un territorio y recibir tributo de la fuerza vencida. En la etapa actual del capitalismo es preciso destruir el territorio conquistado y despoblarlo, es decir, destruir su tejido social. Hablo de la aniquilación de todo lo que da cohesión a una sociedad.

Pero no se detiene ahí la guerra de arriba. De manera simultánea a la destrucción y el despoblamiento, se opera la reconstrucción de ese territorio y el reordenamiento de su tejido social, pero ahora con otra lógica, otro método, otros actores, otro objetivo. En suma: las guerras imponen una nueva geografía." (Carta primera a Luis Villoro)



Dentro de la teoría militar (del siglo pasado) se hablaba de conflictos de alta, mediana y baja intensidad. Siendo los conflictos de alta intensidad los que correspondían a aquellos en los que el conflicto no tiene barreras geográficas y se desarrolla con tecnología militar avazada (pj. la primera y segunda guerra mundial). Por su parte, los conflictos de mediana intensidad son aquellos que involucran a dos o más países. Mientras que los conflictos de baja intensidad son aquellos que se llevan a cabo al interior de los estados y no entre estados, por lo que se manifiestan en "guerra irregular", es decir, aquellas operaciones militares en las que uno de los oponentes no es un ejército, sino un grupo guerrillero o un conjunto de milicias insurgentes. La Doctrina de Seguridad Nacional surgida en el marco de la guerra fria, o tercera guerra mundial, afirmaba que el enfrentamiento entre el bloque "capitalista" y el bloque "comunista", se manifestaba en lo que se llamó "la subversión interna" (conflictos de baja intensidad), la cual supuestamente era promovida y patrocinada por el bloque comunista como parte de un supuesto intento de revolución comunista mundial. La DSN fundamentó su orientación en que todo individuo era un amigo o enemigo; que América Latina se encontraba en guerra contra el comunismo mundial; que América Latina debía permanecer dentro del bloque de países capitalistas; que la guerra era global, total, indivisible y permanente; y que por lo tanto, todas las actividades colectivas o individuales habría que enmarcarse dentro de un escenario de guerra, en el que sólo hay cabida para estar a favor o en contra. Sobre la base de este escenario de guerra los teóricos de la DSN consideraron a las fuerzas armadas como garantes de la seguridad, del desarrollo y del progreso de las naciones.

Lo mismo en la guerra regular (o convencional) que en la irregular la lucha por la derrota moral del oponente cobra una importancia que hay que valorar adecuadamente. La destrucción moral del oponente puede hacer uso de distintas estrategias. La mentira y el terror, son tal vez, dos de sus más poderosas armas. Ambas confluyen en lo que conocemos como "guerra sucia". En la guerra sucia no existe declaración de guerra, no existe reconocimiento del oponente como fuerza beligerante, tampoco hay reconocimiento político, ni reconocimiento de los acuerdos de la Convención de Ginebra. En la guerra sucia se hace uso de fuerzas paramilitares y/o militares para atacar indiscriminadamente a la población civil para así generar terror y restar un posible apoyo a los insurrectos; además se ataca a los grupos bases de apoyo del fuerza oponente, se violan constante y permanentemente los derechos humanos (desapariciones, ejecuciones extrajudiciales, violaciones masivas de mujeres, secuestro, etc.) y se hace uso de los medios de comunicación masivos para difundir mentiras, provocando así la desinformación y la manipulación.

La guerra sucia ha sido exportada a todo el mundo por el ejército gringo, sin embargo, fueron los franceses quienes desarrollaron inicialmente esta variante de lucha antisubversiva. Los generales franceses Roger Trinquier y Paul Aussaresses a partir de sus experiencias contrainsurgentes en Indochina y Argel teorizaron ampliamente sobre técnicas de guerra sucia (represión en zonas urbanas, allanamientos, fichaje, extorsión, tortura, desaparición), mismas que posteriormente aplicaron en toda Latinoamerica, empezando por Argentina tras el golpe militar de 1975. Sin embargo, fue desde 1961 que los militares franceses y sus pares gringos comenzarón a impartir cursos a militares de al menos 13 países latinoamericanos. La operación Cóndor, una de las operaciones contrainsurgentes más importantes en el siglo XX extendió la guerra sucia por toda américa latina: 50,000 asesinados, 35,000 desaparecidos, 400,000 presos, fue el saldo de la misma.

La Doctrina de la Seguridad Nacional fue diseñada para la participación del Ejército (obviamente con apoyo y asesoría externa) en conflictos de baja intensidad desarrollados al interior de los estados y por supuesto, como proyecto de intervención yanqui en toda américa Latina. Al respecto, en general, son tres las categorías de acción que la DSN presupone para los conflictos de baja intensidad, a saber: la contrainsurgencia, la insurgencia anticomunista y el contraterrorismo. En 2009 el Pentágono desclasificó un Manual de Técnicas Contrainsurgentes. En él se afirma que la insurgencia busca debilitar el poder gubernamental existente, su control y su legitimidad por medio de la violencia. A contraparte, la contrainsurgencia es vista como el conjunto de todas aquellas "acciones políticas, económicas, militares, paramilitares, sicológicas y cívicas que puedan ser tomadas por un gobierno para lograr su objetivo", que no es otro, sino la eliminación física de los insurgentes, quienes amenazan "la seguridad y bienestar de la población". En contrainsurgencia, dice el manual, “el lado que aprende más pronto y se adapta más rápidamente –la mejor organización para el aprendizaje– es el que usualmente gana”. Y en otro lugar, apunta: "Conducir una campaña de contrainsurgencia exitosa requiere de una fuerza flexible, adaptable, dirigida por líderes ágiles, bien informados y astutos culturalmente". En lo que respecta al contraterrorismo, este comprende toda las medidas ofensivas para prevenir, disuadir y responder al terrorismo. Las acciones contraterroristas son realizadas generalmente por fuerzas de élite altamente equipadas y entrenadas para ese propósito. Finalmente, en cuanto a la conformación de una fuerza insurgente anticomunista (aunque actualmente el comunismo no es visto por el ejército gringo como una amenaza real), esta no es otra sino la conformación de fuerzas paramilitares, apoyadas por las burguesías locales, nacionales y trasnacionales, entrenadas por la CIA, el ejército nacional y el ejército gringo, creadas con la intención de golpetear (sembrar terror y mentira) a las organizaciones insurgentes, a gobiernos populistas o nacionalistas, y por supuesto a todas aquellas organizaciones sociales que pudieran concentrar en determinado momento un amplio poder de convocatoria para cuestionar el gobierno en turno, pero también para crear un clima de desestabilización e ingobernabilidad, como actualmente está sucediendo en Siria y en otros países del norte de áfrica y medio oriente, donde la insurgencia paramilitar es activada para justificar intervenciones y derrocar gobiernos "enemigos".

Una de las estrategias de mayor impacto, por sus consecuencias graves y permanentes, dentro de las operaciones de contrainsurgencia, son las llamadas "Acciones cívico-militares". A dichas acciones se les considera civiles por contar con el apoyo y respaldo de amplios sectores reaccionarios de la burguesía nacional y trasnacional; se les considera militares por estar planeadas y ejecutadas por los ejércitos (nacionales y extranjeros), sus paramilitares y por mercenarios. Las Acciones cívico-militares son parte importante de los conflictos de baja intensidad o de guerra irregular y éstos se realizan en cuatro fases: 1. búsqueda de acercamiento entre el ejército y la población civil mediante la aplicación de "programas sociales"; 2. Identificación del sustento político y económico del enemigo; 3. Ubicación espacial y geográfica del enemigo; 4. Ataque al enemigo. En la cuarta etapa, que es el ataque al enemigo, se ponen en acción distintas operaciones militares, tales como la operación rastrillo, operativo envolvente, y los bombardeos indiscriminados donde lo característico es arrasar con todo aquello que tenga vida, sea humana, vegetal o animal; además usualmente, para cuando ya se está aplicando la cuarta etapa, ya se han eliminado o desterrado a líderes populares, reventado el tejido social de las organizaciones civiles, desaparecido, torturardo y asesinado a decenas de activistas. Guatemala, Colombia, Honduras, Nicaragua, México, Chile, son países donde aun quedan heridas abiertas por estas "sucias" acciones cívico-militares, que sin embargo, continúan aplicandose impunemente hoy.

Entre las acciones intervencionistas que Estados Unidos ha orquestado en su supuesta lucha contra el comunismo internacional, y que han seguido los postulados de la DSN, están: la Operación Mandrake en Bolivia, Operación Popeye en Laos, Operación Revuelta en Pánama, Plan Camelot en Chile, Plan Lasso en Ecuador y Colombia, Plan de Aldeas Estratégicas en Vietnam, Operación 20 en Cuba, Plan Colonia en Perú, Alianza Anticomunista en Argentina, Operación Tonton Macouts en Haití, Operación Rosa Blanca en Cuba, Operación Patria y Libertad en Chile, Escuadrón de la Muerte en Brasil, Operación Mono en Nicaragüa, Operación Gato en Venezuela, Halcones en México, Operación Guerreros Blancos en El Salvador, Operación Causa Justa en Pánama, y por supuesto el Plan Colombia, el Plan México, Plan Patriota, etc.

Aviación y contrainsurgencia. En un texto donde se analiza la participación de la fuerza área estadounidense en guerra de baja intensidad, se describen así las ventajas y desventajas del uso de la fuerza áerea en labores de contrainsurgencia: "El poderío aéreo es sumamente importante para COIN (contrainsurgencia). Tácticamente, ofrece a las unidades pequeñas la conciencia de situación, la movilidad y el poder de fuego necesarios para aplastar a los insurgentes y explota la vulnerabilidad de éstos impidiéndoles que concentren fuerzas o retengan posiciones fijas. Sin embargo, debemos tener cuidado de no exagerar el valor del poderío aéreo. La ventaja militar del punto elevado del poderío aéreo se convierte en una desventaja (o es irrelevante) en otras fases de COIN dirigidas a controlar poblaciones, que viven en el punto bajo. El poderío aéreo no puede proporcionar la presencia personal de un “policía en la esquina”, ni provee servicios comunitarios básicos. La población local puede buscar y solicitar asistencia de las fuerzas de tierra y otros representantes del gobierno en el área local, pero esencialmente no tienen contacto con el poderío aéreo. COIN e IW tienen que ver con la legitimidad del gobierno—gobierno próximo y personal. El contacto cara a cara no es un punto fuerte del poderío aéreo."

Entre los operativos contrainsurgentes más conocidos y donde la aviación ha tenido una participación importante, tenemos varios ejemplos en Colombia, donde la fuerza áerea no solamente bombardea indiscriminadamente a la población civil, sino particularmente, también realiza operativos de búsqueda y aniquilamiento de líderes rebeldes. Por ejemplo, el bombardeo al campamento internacional de paz de las Farc-Ep en 2008 donde murieron masacrados el comandante Raúl Reyes, 20 guerrilleros y 4 estudiantes mexicanos internacionalistas. Otro ejemplo similiar, fue el bombardeo al campamento donde se encontraba el jefe militar de las Farc-Ep, Jorge Briseño, alias "Mono jojoy", así como recientemente la operación Odiseo donde resultó muerto el jefe del secretariado de las Farc-Ep, Alfonso Cano, quien fue cazado después de dos años de persecución. Alfonso Cano se encontraba en las montañas de Tolimá, las más altas de Colombia ha inicios de 2011. Los satélites altamente especializados de la CIA y el pentágono poco sirvieron para rastrearlo pues la nubosidad espesa es una de las características más importantes de esa cordillera andina. De igual manera la fuerza áerea colombiana poco podía coadyuvar en la búsqueda y rastreo del comandante Alfonso Cano. Se dice que entonces, como parte de una amplia operación contrainsurgente, el ejército colombiano mandó miles de soldados para levantar un cerco a la columna guerrillera en la que se movía Alfonso Cano, así como dispersar a las otras columnas que hacían de círculos de seguridad a la columna del mando central, lo cual lograron después de varios meses. A punto de cerrarse la pinza, Alfonso Cano tuvo que abandonar las montañas de Tolimá. Algunos medios refieren que al descender de las montañas los satélites militares dieron con su paradero (es es la razón de que anduviera rasurado en el momento de su caída en combate). El mal tiempo, sin embargo, hizo que la columna del comandante Alfonso Cano, se les perdiera durante varios días. Cuando finalmente lo volvieron a localizar la fuerza áerea fue mandada a atacar, causando graves daños a la columna guerrillera pero sin logar matar a Alfonso Cano. Lamentablemente, a pesar de su amplio conocimiento del terreno y gran movilidad, el comandante Alfonso Cano fue ejecutado en una acción en tierra, en un enfrentamiento donde el llevaba las de perder pues no era acompañado más que por su guardia personal. Es decir, que la aviación y el uso de satélites militares altamente especializados, poco sirven si el clima presenta gran cantidad de nubosidad... ellos lo saben. Nosotros también tenemos que tomarlo en consideración.

A manera de conclusión provisional, podríamos afirmar que actualmente, y tal vez siempre ha sido así, aunque esto pudiera ser un arcaísmo, toda guerra es también una guerra sucia, por cuanto que en toda guerra se busca la derrota moral del oponente y para ello no hay mejor (o peor, que para el caso es lo mismo) manera que degradarlo, humillarlo, violarlo, torturarlo... En este sentido, es importante dejar en claro que la implementación de estrategias de guerra sucia en el combate a la "subversión interna" da lugar a la conformación de estados terroristas. La guerra sucia hace del terror una política de estado. Es decir, guerra sucia es igual a terrorismo de Estado. La contrainsurgencia no es una lucha centrada en lo militar sino una lucha integral que reparte sus operaciones en lo político, en lo económico, en lo religioso, en lo ideológico, en lo cultural, con el fin de eliminar la "subversión interna". "Los gestores de la guerra subversiva intentan silenciarla -dice un libro de técnicas en contrainsurgencia escrito por un oficial retirado del pentágono-, puesto que su avance depende en buena medida de la falta de conocimiento que tiene el oponente atacado sobre las tácticas y procedimientos que lo hieren." Es decir, necesitamos estudiar la represión y los operativos contrainsurgentes que se lanzan contra los movimientos sociales para así, en el mejor de los casos, tener capacidad de neutralizar dichos operativos y en el peor de los casos, saber como apoyar a la población reprimida.

En la siguiente entrega de esta serie de artículos comentaremos algunas historias de guerra sucia llenas de terror y mentira que merecen ser estudiadas con detenimiento.

Gracias

Noviembre 2011

sábado, 12 de noviembre de 2011

Carmen Ponce Custodio, compañera Sol

Nació en Tapijulapa, Tabasco el 5 de abril de 1950. Era hija de la señora Soledad Custodio y de Antonio Ponce, próspero comerciante del lugar. Desde que su familia se mudó a Sabanilla, Chis., realizó labores de asistencia social en comunidades choles de la región. Cursó la carrera de contaduría en la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco y se incorporó a una célula de estudiantes comunistas, encabezada por Rafael Vidal.

En 1971 fue reclutada por las FLN y el mismo año pasó a la clandestinidad, siendo la primera guerrillera profesional de la organización. Para poder abandonar su casa y obtener una dote montó una boda falsa con Alfredo Zárate, aunque después contrajo matrimonio con él ante tribunal revolucionario. Por órdenes de la organización, estudió enfermería y electricidad y vivió en diferentes casas de seguridad.

La noche del 14 de febrero de 1974 se encontraba en la casa de Nepantla y fue una de las primeras en caer. Sus restos fueron sepultados clandestinamente en el Panteón Dolores y su familia nunca pudo recuperarlos.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Wirikuta: El corazón de la vida bajo el acecho transnacional. Tercera parte

En su camino por defender Wirikuta el pueblo wixárika ha logrado construir un frente histórico de lucha con carácter regional que resultó en septiembre de 2010 en la formación del Consejo Regional Wixárika, órgano integrado por los gobiernos tradicionales y agrarios de las comunidades de San Sebastián, Santa Catarina y Bancos de San Hipólito, que se une en una sola voz extendida, a través del Frente en Defensa de Wirikuta Tamatsima Ha´a (FDW)[1] hacia la sociedad civil, para manifestar que “no puede haber negociación posible con la empresa minera y el gobierno federal, cuando lo que está en juego es la vida de un pueblo”.

El peregrinar del pueblo wixárika por la defensa de la vida comenzó hace cientos de años cuando los primeros peregrinos salieron de Haramara, San Blas (Nayarit) en busca de la luz que iluminara al mundo; desde ese entonces los wixaritari se han dedicado a protegerlo y librarlo de la oscuridad de la noche. Elevando sus rezos, ellos acuerdan con los antepasados la continuidad de la vida y la permanencia del sol en los cielos.

Ese es el destino de estos legendarios peregrinos, cuya vida fue marcada por los pasos firmes de sus antepasados que les heredaron esta importante tarea: la defensa de la vida. Y siendo esta su tarea epopéyica, no han dejado ni dejarán de peregrinar con tal de protegerla.

Así lo han manifestado a través de sus prácticas ancestrales, de su peregrinar cíclico y desde su ritualidad cotidiana; y así lo manifiestan ahora frente a la amenaza atroz de las empresas mineras transnacionales Firts Majestic y Minera Golondrina, que buscan reventar las venas del territorio sagrado de Wirikuta, donde circula la sangre y energía que hacen palpitar su corazón.

La lucha por la vida es inclaudicable y Wirikuta representa eso, un pilar fundamental de la vida y del universo, de “la integridad de Wirikuta depende que se mantenga el equilibrio de la vida en el universo” y dañarla significaría ir contra la propia existencia, así lo aseguran los wixaritari que advierten que es más fácil indemnizar a las empresas mineras que han adquirido concesiones en este territorio, que cargar con la tragedia que implicaría destruir Wirikuta.

El peregrinar por la defensa de la vida no tiene fronteras

Los wixaritari con sabiduría y serenidad, se han unido en un sólo rezo y en un sólo canto para hacer escuchar su voz de protesta ante el gobierno federal, ante instancias internacionales y ante los representantes de los intereses transnacionales.

Desde que la garra sin escrúpulos del capital transnacional apuntó hacia su corazón sagrado, los wixaritari se han valido de todos los recursos jurídicos a su alcance, tanto a nivel nacional como a nivel internacional, asi como de todas las acciones de resistencia pacífica posibles con tal de echar atrás los megaproyectos mineros de las empresas First Majestic Silver y Minera Golondrina[2] que juntas tienen 30 concesiones que les fueron otorgadas por el gobierno federal y que les permitirían devastar este territorio sagrado.

Ante esta amenaza de destrucción y agravio a su cultura, en una carta emitida el 9 de mayo del 2011 a la Presidencia de la República, el pueblo wixárika expresó su palabra urgente a Felipe Calderón:

Señor presidente, somos originarios de este país, somos la raíz antigua y reiteramos: No nos destruyan la cultura wixárika, no se destruyan ustedes mismos por ignorancia de no saber lo que contienen esos valles de Wirikuta y esa sierra donde se ilumina el mundo.[3]

No obstante, este atropello que comenzara con la violación del pacto de Hauxa Manaka[4] (Durango, 2008), donde Felipe Calderón se compromete a proteger los sitios sagrados de los wixaritari, se extiende con la evasión y el letargo de las respuestas por parte del Ejecutivo Federal, que el 7 de junio turna el caso de Wirikuta a las Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), a la Secretaría de Economía (SE) y a la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI).

En una segunda carta entregada el 23 de agosto a Presidencia, el pueblo wixárika expresa su desacuerdo y preocupación por la forma en la que han abordado el problema estas instancias federales, que hasta esa fecha no habían emitido ningún tipo de respuesta al caso que les fue asignado.

Pero así como lo han advertido en las cartas entregadas y a pesar de la anuencia gubernamental, el pueblo wixárika ha continuado su peregrinar en el “camino difícil pero firme en convicción” de detener la amenaza que se ciñe sobre el corazón de la vida y de su cultura.

Los viejos y jóvenes sabios wixaritari saben que más allá de los amplios horizontes de su visión del mundo hay otras formas cargadas de ambición y de obscuridad, saben del poder y de sus argucias, y saben que hay que ir a poner límites allá donde las cosas se definen. Y es por eso que este año llevaron su peregrina lucha más allá del territorio mexicano.

A principios de febrero de 2011 los wixritari viajan a ciudad de Mirando, Texas, para reunirse con la Iglesia Nativa Americana (NACNA)[5] que resuelve hermanarse con el pueblo Wixárika en el Frente de Defensa de Wirikuta Tamatsima Waha´a y coordinarse con el mismo para demandar la cancelación inmediata de todas la concesiones mineras. Además, la NACNA se compromete a apoyar “política, técnica y económicamente la aplicación de un modelo alternativo de desarrollo en la región de Wirikuta”.[6]

Para el 19 de mayo, los wixaritari vuelven a cruzar fronteras y comparecen ante el Décimo Foro Permanente de la ONU para denunciar el caso y solicitar la intervención de la ONU en la solución de sus peticiones[7]; hecho que ha tenido eco en la participación activa de James Anaya relator especial de la ONU comisionado para llevar el caso de Wirikuta, así como en los recientes resultados de la reunión que mantuvo una delegación wixárika el 28 de octubre con integrantes del Alto Comisionado de la ONU que se manifestaron por “dar seguimiento y atención directa a la violación de derechos de los pueblos indígenas que suponen las concesiones mineras en la región”[8].

Mismo en mayo, vestidos con sus trajes tradicionales y llevando un bastón tradicional como símbolo de solidaridad con los pueblos del norte, los delegados wixaritari Jesús Lara Chivarra y Cilau Candelario Valadéz, viajaron desde la sierra de Jalisco y Nayarit para entrar a la junta anual de los accionistas de First Majestic Silver Corp. En principio, los cuerpos de seguridad les prohibieron el paso, pero finalmente pudieron entregar su mensaje a la empresa y al mundo:

“Ellos nos trataron de intimidar, pero nuestra presencia aquí lo hicimos para demostrar que podemos venir a su tierra, hablar su idioma y no nos intimidan aunque nos pongan policías, nos pongan obstáculos…”[9]

Los wixaritari han dejado claro que su peregrinar en esta lucha ha llegado y llegará a donde sea necesario, que su defensa de la vida no tiene fronteras. De esta manera, bien firmes y con la cabeza en alto, con sus ropas tradicionales coloridas, bordadas con venados, hikuris -símbolos de su cultura- el pueblo wixárika ha ido en busca de los hombres del poder y del dinero; se ha erguido ante los altos funcionarios de la ONU, de la transnacional canadiense First Majestic Silver, y del jefe del Ejecutivo, Felipe Calderón para manifestar que el Pueblo Wixarika no va a negociar, porque el corazón de su madre, la tierra, no se vende.

El MPJD y las otras víctimas de la guerra

Al lado del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD) el pueblo wixárika encaminó su peregrinar en la llamada “ruta del dolor” acompañando en su recorrido por el país a las víctimas de la guerra contra el narcotráfico.

De norte a sur la demanda de “alto a la guerra” se internó las entrañas de un México desgarrado por la violencia atroz de los grupos criminales y el Estado mexicano, cuyo fracaso habla a través de los más de 50 mil muertos, 20 mil desaparecidos y miles de desplazados y huérfanos que ha dejado esta guerra.

Además del dolor inconmensurable de las víctimas, las caravanas[10] recogieron la voz e indignación de los pueblos originarios del norte y del sur cuya historia de agravios se cuenta en “la larga noche de los 500 años” denunciada en 1994 por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional.

La demanda de “paz y justicia para los pueblos indígenas de México” de nueva cuenta se hace presente, ahora en un escenario de agravios potencializados por la guerra contra el narcotráfico, por la creciente incursión de grupos paramilitares y criminales en territorios indígenas, y por la voracidad del sistema capitalista neoliberal cuya cara servil a los intereses extranjeros deja asomar su rostro más brutal.

La historia aún es presente y la guerra de baja intensidad contra los pueblos originarios ahora toma forma de destrucción de los territorios, de desplazamiento, de desapariciones forzadas, de asesinatos, de violación a los derechos fundamentales, de acoso militar y paramilitar, de represión y de criminalización.

Así lo expresa la palabra de los pueblo originarios que en esta ruta del dolor se manifestó a través de los p’urépechas de Cherán, de los nahuas de Ostula, de los wixaritari (huicholes) de la Sierra Madre Occidental, de los rarámuri (taraumaras) de Chihiuahua, de los coras y tepehuanes de Durango, de los mepa´a (tlapaneos) y na´a savi (mixtecos) de la Policía Comunitaria de Guerrero, de los triquis de San Juan Copala, y a través de la memoria masacrada de las Abejas de Acteal.

Los agravios hacia las comunidades indígenas no han cesado y por el contrario se disfrazan de nuevas formas de brutalidad que se manifiestan a través de una guerra por el control de los recursos y los territorios, que a su paso amenaza la existencia de culturas milenarias, tal es el caso de los wixaritari que hoy ven en peligro la vida y permanencia de su pueblo por las empresas transnacionales.

En su camino por defender Wirikuta, en el marco del MPJD los wixaritari se hicieron escuchar a lo largo del recorrido de la Caravana al Sur donde su palabra también se extendió a través de la voz del Javier Sicilia, que en Xalapa, Veracruz, hizo una advertencia a los gobernantes y un llamado a la comunidad internacional:

“Tocar Wirikuta es un crimen contra la humanidad, Wirikuta es el espíritu de un pueblo que se ha vuelto el espíritu universal, tocar Wirikuta es tocar el cosmos; si la tocan es un crimen imperdonable. Hacemos un llamado muy severo y muy fuerte a las autoridades y lo señalamos frente al mundo que si tocan Wirikuta y se lo entregan a empresas mineras y sobre todo extranjeras están cometiendo un crimen contra el cosmos, los señalamos y le pedimos a la comunidad internacional que presione para salvar Wirikuta”.

Junto con el MPJD los wixaritari han establecido un diálogo directo con los representantes del gobierno federal, ello pese a su reticencia de dar escucha a las demandas indígenas incluidas en el Pacto Nacional firmado el 10 de junio de este año en Ciudad Juárez, Chihuahua.

Desde el primer Diálogo por la Paz en el Castillo de Chapultepec llevado a cabo el 24 de junio, hasta el segundo encuentro con el ejecutivo del pasado 14 de octubre; hubieron 16 diálogos con representantes del gobierno y miembros de la sociedad civil, en los cuales hubo un avance lento y deficiente que resultó en el segundo encuentro con una réplica mediocre frente a las demandas puntuales del movimiento, donde el tema indígena fue nulificado por parte del representante del Ejecutivo, Felipe Calderón, que al tener que responder sobre las demandas de los pueblos originarios contestó: del tema indígena no voy a hablar, para después vanagloriarse de “todo” lo que su gobierno ha hecho por las comunidades indígenas.

Pese a los intentos por invisibilizar su presencia e impedir que un representante de los pueblos indígenas ocuparon un lugar en la mesa de intervenciones; en una intervención audaz, Santos de la Cruz se paró ante la comitiva gubernamental –predispuesta a un “diálogo” que para ellos no es más que un espectáculo mediático- y tomó el micrófono para exigir de cara al ejecutivo la cancelación inmediata de las concesiones mineras otorgadas en territorio sagrado de Wirikuta.

Salvemos Wirikuta: Corazón sagrado de México “El Momento es Ahora”

El FDW ha asumido desde su conformación la lucha en defensa del territorio sagrado del pueblo wixárika, llevando acabo acciones de vinculación con la sociedad civil, de recaudación de fondos, de difusión y de cobertura.

En el marco de estos esfuerzos, acompañados por integrantes y organizaciones de la sociedad unidas en un solo frente de lucha, el pasado 26 y 27 de octubre, tuvieron lugar las movilizaciones de la jornada “El momento es ahora. Salvemos Wirikuta, Corazón sagrado de México”, que en un acontecimiento histórico, logró movilizar desde la Sierra Madre Occidental a una delegación del pueblo Wixarika de aproximadamente 200 indígenas, entre autoridades, jicareros, consejos de ancianos, mujeres y niños, que llegaron a la ciudad de México representando a cada una de las comunidades que lo conforman, para exponer las razones de la legítima defensa de su territorio y su cultura, y a hacer un llamado a México y al mundo para su defensa.

A su llegada a la capital del país, el FDW y la delegación wixárika, ofrecieron una conferencia de prensa en la que se explicita el mensaje que vinieron a traer el pueblo wixárika a través de sus cuatro comunidades principales, San Sebastián, San Andrés, Santa Catarina y Bancos de San Hipólito, unidas en un solo rezo y canto de lucha:

“Hoy precisamente estamos aquí, no por gusto sino porque existe esa necesidad y porque existe esa urgencia de que aprendan esa palabra: respeto. Hacia el pueblo indígena, hacia el pueblo wixárika y hacia todos los humanos (…) Eso es lo que estamos exigiendo, porque nosotros sabemos cuidar el mundo, y a eso es lo que le estamos apostando, cuidando el mundo, el planeta, a la madre tierra. Esa la palabra de nuestros ancestros, y queremos que el estado mexicano lo tome minuciosamente y lo considere, así como se ha vestido con los trajes wixaritari, comprometiéndose a respetar nuestro sitio sagrado, que también se ponga la camiseta para retirar esas concesiones. Wirikuta no se vende, se ama y se defiende. Hoy convocamos: ‘Salvemos Wirikuta, corazón sagrado de México’”.[11]

Por la tarde del día 26, los wixaritari llevaron su palabra a la UNAM, en donde la comunidad universitaria dio la bienvenida y manifestó su apoyo incondicional, también refrendado el día 27 por estudiantes y académicos de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH).

Una vez que los rezos de la delegación de 200 wixaritari se elevara en una ceremonia en la pirámide de Cuicuilco, para dar luz a las velas de la vida como un solo pueblo; el día 27 por la tarde, salió del Ángel de la Independencia una manifestación inédita, rica en colores y convicción, que con la concurrencia de más de 3 mil personas intentó arribar a la residencia oficial de los Pinos. No obstante, los pasos de este peregrinar fueron detenidos por vayas y granaderos, que apenas permitieron el acceso a una comitiva que pasó a entregar una nueva carta con la exigencias del pueblo wixárika.

Así, a lo largo de estos días de movilización, la palabra del pueblo wixárika hermanada con las voces que a nivel nacional e internacional apelan a la conciencia sobre el significado vital de Wirikuta, exigieron el cese a las pretensiones mineras y agroindustriales que de concretarse conducirían a la destrucción del territorio sagrado y de la cultura Wixárika, y más temprano que tarde, de la humanidad. “Es un precedente histórico, sino se respeta Wirikuta, por lo tanto, no se va a respetar el planeta”[12].

“Wirikuta no se vende”, estas son las palabras que han acompañado el peregrinar de los wixaritari que en su camino se va fortaleciendo a través de las voces que se suman a la defensa organizada de Wirikuta, que se extiende desde los indígenas de la Iglesia Nativa Americana, hasta el canto de artistas reconocidos como Rubén Albarrán de Café Tacuba, Roco y Moyenei de Sonidero Mestizo, Lengualerta; y de actores como Daniel Giménez Cacho, Gael García Bernal, Ana Claudia Talancón, José María de Tavira, Miguel Rodarte y Damián Alcazar; así como de Manu Chao y Aterciopelados que también han comprometido su apoyo.

No obstante la fuerza de la resistencia que ha venido gestando el pueblo wixárika, ahora acompañada por diversos sectores de la sociedad civil nacional e internacional, la garra del capital se posa acechante y sínica sobre Wirikuta, y las amenazas de la devastación natural, de la destrucción de la biodiversidad y de la pérdida del patrimonio cultural, son latentes.

Las transnacionales, cobijadas por el gobierno, siguen apostando al desgaste, a la simulación y a la cooptación. Ofrecen migajas de oro a cambio del agua pura, unos cuantos puestos de trabajo a costa del Cerro del Quemado, más promesas de desarrollo por certezas de devastación, residuos de plata y oro a cambio de su territorio sagrado, a cambio de la vida. Es esta la lógica del capital, imposibilitada para entender que la vida no está en venta.

Los pueblos indígenas de México vuelven a dar lecciones de dignidad. En medio de la guerra y lo turbio de un panorama nacional desesperanzador por incierto, el pueblo wixarika, los nahuas de Santa María Ostula, las comunidades zapatistas, el pueblo de Cherán Keri, las comunidades de la montaña de Guerrero, reiteran en un mensaje unísono: la tierra y la propia cultura no se negocian, y en el camino por la defensa de la vida no hay marcha atrás.

Hoy el reto es defender Wirikuta partiendo de que la amenaza de desterritorialización y reestructuración de los territorios indígenas, refuncionalizados a la dinámica del mercado internacional, representan en lo inmediato una amenaza a su cultura y en el caso de Wirikuta una amenaza para toda la humanidad.

La defensa del corazón sagrado de México pasa ahora por un momento crucial, y es imprescindible asumir que la lucha del pueblo wixárika es nuestra, pues Wirikuta es pilar que sostiene el mundo, transmite conocimiento y permite la vida. Si no somos capaces de esta defensa frente a la ambición voraz del capital transnacional y el gobierno desnacional, entonces el destino de la humanidad es –como bien advierte el pueblo wixárika- la vuelta a la obscuridad, la destrucción de la vida.

Las actuales y vigentes demandas del pueblo Wixárika expresadas en la carta entregada al Ejecutivo en el contexto de la movilización del 27 de octubre, señalan claramente sus exigencias innegociables.

“Somos la Nación junta. Todas las comunidades juntas. Todas las comunidades wixaritari puestas de acuerdo para venir con ustedes a exigir que nos cumpla urgentemente las siguientes peticiones que se basan en nuestros derechos constitucionales y en la palabra que usted dio de proteger nuestros lugares sagrados en el pacto Hauxa Manaka en el año 2008.”

1. Cancele las concesiones mineras que el Estado mexicano otorgó en el área Natural Protegida de Wirikuta, tanto en la Sierra de Catorce así como en el bajío donde crece la planta sagrada Hícuri.

2. Que se frenen los megaproyectos de empresas agroindustriales en el área donde crece el Hícuri.

3. Que se ponga en marcha un proyecto alternativo, que genere trabajo a los pobladores locales y al mismo tiempo convierta a Wirikuta en una Área Natural Protegida, que sea un modelo de conservación ecológica reconocida mundialmente.

4. De igual forma demandamos que los sitios sagrados de Xapawiyemeta, en la laguna de Chapala, Jalisco, Hauxa Manaka, en el estado de Duango, y Tatei Haramara, en el puerto de San Blas, Nayarit, tengan derechos federales que garanticen su preservación y regeneración ecológica y mantengan su condición de patrimonio cultural wixarika blindados contra las privatizaciones.

5. No es esta la primera carta. Le hemos entregado a través de diversas comisiones de nuestras autoridades tradicionales y agrarias estas mismas peticiones. Y no hemos obtenido respuesta. Hoy venimos hasta su casa presidencial de los Pinos a pedir que nos escuche y que cumpla su palabra. Nuestros lugares sagrados son tesoros de vida para todo el mundo. Es su obligación como presidente protegerlo, ahora es el momento.

6. Por último le solicitamos una audiencia personal con usted, en su carácter de jefe del Estado Mexicano, con la finalidad de establecer una mesa de trabajo para dar solución a los puntos antes mencionados. Esperamos su respuesta y volveremso todas las veces que sean necesarias para cuidar la vida.[13]

[1]¿Quiénes somos? Para ampliar información sobre el Frente en Defensa de Wirikuta Tamatsima Ha´a y sobre los miembros que lo integran, consultar en: http://frenteendefensadewirikuta.org/wirikuta/?page_id=366

[2] Para tener información más específica sobre las concesiones, las empresas filiales que las adquirieron y las extensión de superficie de las mismas en: Wirikuta: El corazón de la vida bajo el acecho transnacional. Primera parte. Agencia Autónoma de Comunicaión Subversiones.

[3] “Carta urgente del pueblo wixárika al presidente de México y a los pueblos y gobiernos del mundo”, 9 de mayo de 2011. Para ampliar el contenido e información de esta carta consultar en: http://frenteendefensadewirikuta.org/wirikuta/?p=913

[4] Pacto Hauxa Manaka para la Preservación y Desarrollo de la Cultura Wixárika. Periódico Oficial. Órgano del Gobierno del Estado de Nayarit, 15 de noviembre del 2008. Para ampliar el contenido del pacto consultar en: http://wixarika.mediapark.net/sp/documents/2.PactoHauxaManaka.pdf.

[5] La Iglesia Nativa Americana de Norteamérica, Inc. (“NACNA”) es una asociación internacional que representa a los grupos y miembros pertenecientes a la Iglesia Nativa Americana en Estados Unidos, Canadá y México en asuntos referentes al uso sacramental del Peyote; y respalda los derechos de los miembros de las tribus federalmente reconocidas en los Estados Unidos de América, así de Canadá de México.

[6] Para ampliar el contenido de el acta de “Resolución para la Preservación de Wirikuta de la IGLESIA NATIVA AMERICANA DE NORTEAMERICA” consensada por dicha organización el 12 de febrero de 2011 consular en: http://frenteendefensadewirikuta.org/wirikuta/?p=683

[7] “Declaración de Wixárika en la ONU”. En: http://frenteendefensadewirikuta.org/wirikuta/?p=9

[8] La Jornada: “Oficina de la ONU ofrece revisar sitio de conflicto”, 29 de octubre de 2011. Para ampliar contenido de la nota consultar en: http://www.jornada.unam.mx/2011/10/29/politica/003n1pol.

[9] Tracy Barnett, “Encarando el miedo, construyendo alianzas en Vancouver”, Proyecto Esperanza, 21 de Mayo 2011. En: http://theesperanzaproject.org/es/2011/05/encarando-el-miedo-construyendo-alianzas-en-vancouver/

[10] Los días 5 de junio y y 9 de septiembre salen de la Ciudad de México las caravanas impulsadas por el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD), encabezado por el poeta Javier Sicilia, que se dirigieron al norte y al sur del país para internarse en la llamada “ruta del dolor” de la guerra contra el narcotráfico y mostrar su solidaridad a los Estados más azotados por la violencia atroz del crimen organizado.

[11] Palabras de Santos de la Cruz en nombre del pueblo wikárika, durante la conferencia de prensa del 26 de octubre en la ciudad de México.

[12] Palabras de Santos de la Cruz, en el Video “Marcha en defensa de Wirikuta”. En:http://www.youtube.com/watch?v=10rPvLohYMY&feature=share

[13] Carta al Ciudadano Felipe Calderón Hinojosa, Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, México, D.F. a 27 de octubre de 2011